El Programa P ofrece consejos prácticos y actividades para ayudar a los hombres a ser padres más comprometidos, cariñosos y justos, desde el embarazo de sus parejas hasta la infancia de sus hijos. Estas ideas surgen de años de investigación y experiencia en diferentes ámbitos.
Hablar con hombres sobre la paternidad es una buena manera de iniciar conversaciones sobre las viejas ideas sobre lo que significa ser hombre y cómo estas ideas perjudican a las comunidades. El Programa P utiliza herramientas como guías parlantes, dramatizaciones y actividades prácticas, como aprender a cambiar pañales, para ayudar a los hombres y a sus parejas a hablar y cambiar las ideas anticuadas sobre la masculinidad y las ideas injustas sobre el género. El objetivo es hacer de las familias y las comunidades un lugar mejor para todos.
¿Qué opinan los participantes del Programa P (padres y sus parejas) sobre su experiencia con el programa? A continuación, hemos recopilado algunas citas de participantes en las adaptaciones del Programa P en Líbano y Bolivia.
No hay ningún lugar donde pueda obtener consejos sobre cómo educar a nuestros hijos. Creía que este programa podría darnos pautas, una orientación sobre cómo podemos tener un mejor hogar, un mejor diálogo, comprender y guiar a nuestros hijos de la mejor manera posible. – Participante masculino de 48 años
Mi esposo ahora se disculpa por lo que hizo sin sentir que está perdiendo su masculinidad. Tiene en cuenta mi opinión en todo y comparto con él todas las responsabilidades del hogar. Antes pensaba que la violencia se justificaba cuando yo no cumplía con mis deberes correctamente, pero esto cambió desde que participó en el programa. Participante femenina de 31 años.
“Comunicarme y respetar a mi esposa y a mis hijos significa que soy un buen hombre.” - Participante masculino de 33 años
“En este aspecto este curso me ayudó mucho, antes solo estaba enfocado en el trabajo, entonces el curso me ayudó a ver con más amplitud cuándo necesitas colaborar en el hogar con tu pareja e hijos.” – Participante masculino de 37 años
“Él no grita… primero habla, no hay que gritarles directamente, si les regañas, lloran, sus corazoncitos entonces guardan rencor… ha cambiado en eso, ya no hace eso, les habla… trata a los niños con calma.” Participante femenina de 33 años
Para una comprensión más profunda de las perspectivas de los participantes y los impactos del programa, puede acceder a los resúmenes de aprendizaje. aquí.