La exposición a la violencia en la infancia puede tener graves consecuencias para la salud física, emocional y mental, y está estrechamente relacionada con la probabilidad de perpetrar o sufrir violencia de pareja en la edad adulta. Este proceso, que vincula la violencia en la infancia con la violencia en la edad adulta, puede interrumpirse si se proporciona a niños, niñas y adolescentes intervenciones de calidad y específicas que satisfagan sus necesidades de apoyo psicológico y social. En esta nueva revisión bibliográfica encargada por Equimundo, los autores analizan intervenciones psicosociales prometedoras para interrumpir los ciclos de violencia en diversos entornos de países de altos y bajos ingresos, tanto en entornos individuales como grupales/comunitarios, y mediante profesionales con formación formal, así como facilitadores con formación comunitaria.
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